CIRCULACIÓN
Las calles y carreteras están bien concurridas -salvo las de acceso a las ciudades más grandes-, son estrechas, el asfalto irregular, sin rayas continuas ni discotinuas y si las hay, da igual, sirven de poco. Apenas hay señales de tráfico, tienen su particular código de circulación y una gran facilidad para armar y desarmar un atasco.
El parque móvil es muy variado en cuanto a modelos y antigüedad. Camiones y furgonetas pueden cumplir muchos muchos años y estar circulando a “paso de hormiga” ahumando de negro a la cola que les sigue.
No existe la ITV y los seguros son escasos. Los siniestros, los solventan entre ellos sin necesidad de partes ni peritos.
Los adelantamientos se indican con el intermitente o pitando. Es fácil encontrar a dos vehículos adelantando en ambos sentidos al mismo tiempo y ver como uno de ellos se aparta un poco, el otro frena, otro acelera y lo que parecía accidente inminente se resuelve asombrosamente, volviendo todo, en unos segundos, a la normalidad.
Conducir en Bali es toda una aventura para la que hay que atreverse. Se requiere habilidad, mucha atención, reflejos bien desarrollados y prudencia.
En el trayecto, pueden aparecer, como “caídos del cielo”, sin saber de donde salieron: motos, coches, niños, perros, gallinas…u otras sorpresas. Además, es frecuente encontrar largas procesiones humanas o de camiones cargados de gente que se dirigen al templo o al mar en días de ceremonia.
MOVERSE POR LA ISLA
En coche
Conducir un coche es arriesgado y, además de las razones mencionadas, se desaconseja por: el cambio de dirección (se circula por la izquierda), el lado del conductor esta en la derecha del vehículo, la falta de experiencia, el desconocimiento de las rutas y los “altos” de la policía que va “a la caza del turista”.
Alquilar un coche con conductor es la opción más ventajosa, cómoda y segura, para visitar la isla relajadamente y disfrutar de las maravillosas panorámicas.
. Información y contactos recomendables:
- En Ubud:
- La compañía Ubud Taxi realiza servicios de transporte de todo tipo: transfer al aeropuerto, excursiones por la isla y los desplazamientos específicos que necesites. Esta compañía la creó Paul, un señor holandés afincado en Bali desde hace 5 años y la gestiona de forma desinteresada, sin afán de lucro, con el fin de dar empleo a jóvenes locales. Él selecciona al personal y gestiona los viajes.
Sus datos: web: www.ubudtaxi.com
Tel. en Bali: 081 237 679 412
Idioma: inglés.
- Bali Lines Tourist Service. Es una agencia local que realiza servicios de transporte de todo tipo, especialmente interesantes las excursiones por la isla compartiendo vehículo (que resultan a mejor precio) y reservas de vuelos nacionales e internacionales. Ketut, el propietario, es un buen profesional y una magnífica persona.
Sus datos:
Jl. Hanoman, 52. Madang Tegal Kelod, Ubud
e-mail: ketut_punia@yahoo.com
Tels. en Bali: Oficina: 0361 97 48 41, móbil: 081 236 188 10
Idioma: inglés.
- En Denpasar: Ketut Rumadi, balinés que habla perfectamente castellano con 15 años de experiencia como conductor y guía turístico. Trabaja por su cuenta y para varias agencias españolas.
Teléfono en Bali: 081 239 851 85.
En moto
Se puede alquilar una moto para los desplazamientos cortos (para los largos puede resultar cansino e incómodo), conduciendo con precaución y teniendo en cuenta las observaciones anteriores.
El precio varia en función del modelo y la época del año.
La moto es el transporte más común para toda la familia, se monta el padre, la madre y los dos niños, tan felices y contentos.
En transporte público
Bus
Los autobuses públicos son escasos. Existe un tipo de bus llamado “Suttle bus” que realiza un servicio regular de transporte entre las ciudades de Kuta, Sanur, Denpasar, Ubud y Padangbai, con tarifas y horarios establecidos.
“Bemo”
Es el transporte público local más antiguo y tradicional.
Las “bemo” son pequeñas furgonetas viejas con dos bancos paralelos en su interior, calurosas, polvorientas y que huelen a gasóleo donde se apiñan los pasajeros locales con sus bultos, cestos y demás artilugios, hasta que no cabe un alfiler.
Además de en su parada correspondiente, las bemo se detienen en cualquier punto del trayecto para recoger o dejar pasajeros si así lo solicitan, haciendo la señal de alto con la mano o gritando “stop”.
Si tienes curiosidad, tiempo y no te importa la incomodidad, probarlo puede ser una experiencia divertida para ir de un pueblo a otro y volver.